Tendencias de monitoreo de trazabilidad de la cadena de suministros

FEP

Por Fernando Passarelli,

Coordinador de VALOR, para comunicaRSE.

Nadie ya duda de que los impactos de los negocios y las responsabilidades extendidas hacen de la cadena de valor un ámbito estratégico para la competitividad de las empresas. Por ello, la rastreabilidad de la cadena de suministro es una prioridad clave para muchas empresas y se considera como el primer paso para garantizar la sostenibilidad de dicha cadena. Como parte de su estrategia de gestión, la trazabilidad de producción permite a estas empresas garantizar que cada producto se fabrique con el máximo cumplimiento de la legislación laboral, medioambiental, de salud y seguridad del producto, y con los principios laborales y sociales establecidos en los Códigos de Conducta.

Una vez incorporada la rastreabilidad en un Código de Conducta para Fabricantes y Proveedores, las empresas suelen requerir que cada proveedor declare todas las unidades de producción sin importar el nivel y el proceso. Para facilitar esta tarea, es cada vez más frecuente la implantación de plataformas en línea a través de las cuales los proveedores pueden ingresar todas las fábricas utilizadas para la elaboración de pedidos en todos los procesos y niveles del proceso de fabricación.

Los datos proporcionados se utilizan luego durante el «monitoreo de trazabilidad» donde los auditores internos no sólo evalúan la capacidad de producción de cada fábrica, sino que también verifican que todas las unidades de producción informadas a través del sistema de gestión del fabricante estén declaradas y aprobadas correctamente.

Como el sistema de gestión del fabricante se diseña específicamente para cubrir las necesidades de trazabilidad, el sistema también se integra con otras herramientas de las empresas, como plataformas de pedidos utilizadas por los equipos de compras y herramientas internas de supervisión de proveedores para los equipos de sostenibilidad.

Los datos recopilados a través del sistema se consolidan en una única base de datos, permitiendo a los equipos de compras, los de sostenibilidad y proveedores compartir y acceder a información completa en tiempo real sobre el comportamiento de la cadena de suministro en relación con los estándares establecidos.

Además del mapeo y monitoreo de la cadena de suministro, las empresas también realizan con cada vez más frecuencia entrenamientos regulares y concientización entre proveedores sobre buenas prácticas en torno a la trazabilidad de la producción.

Este sistema de gestión permite monitorear globalmente las cadenas de suministro independientemente del nivel y el proceso, y garantizar que todos los trabajadores involucrados en la producción estén cubiertos por los programas establecidos diseñados para proteger sus derechos.

En base a ello, la creación de herramientas y programas de trazabilidad específicos integrados en el modelo comercial permite un control más eficiente de la cadena de suministro y una cooperación fluida entre los proveedores y los equipos de compras y sostenibilidad de las empresas.

 

Fuente: comunicaRSE